Las fotos que he hecho hoy también llevan su carga mágica ¿no os parece?
He aprovechado la lluvia de esta mañana para estar un rato en el jardín y practicar la fotografía de mi tema preferido, capturar la gotas de lluvia atrapadas entre los tallos y las hojas.
La OMS salió enseguida para desaconsejar su consumo. Que la Artemisa tenga en su composición activos que puedan combatir según qué, eso no garantiza que tomándose infusiones o triturando la planta se consiga la curación. La planta tiene más componentes y puede ser dañina en según que dosis.
Lo estamos viendo todos los días, los que están en pro o en contra en el cómo luchar contra esta enfermedad.
Hay activistas pro productos naturales que defienden los poderes de esta planta en contra de las Farmacéuticas tachándolas de explotadoras de la salud y criticando su desprecio por los remedios naturales...
Yo a lo mío.
Paseando por el vivero donde habitualmente compro plantas, la vi. Quedaba un solo ejemplar y me sentí afortunada en llegar a tiempo. Se está desarrollando muy bien y ya casi ha triplicado su envergadura y es realmente bonita. Una mata que promete ocupar un buen espacio con hojas verdes grisáceas y con una cierta pelusilla recubriéndolas. Ideal para retener las gotas de la lluvia caída. Todavía no ha florecido, habrá que esperar.
A Artemisa diosa griega y hermana gemela del dios Apolo, protectora de la mujer yo le tengo su espacio en el jardín.
De momento no pienso ni fumármela ni prepararme ningún té con ella. La cuido y la fotografío y seguro que ella me lo sabrá recompensar.