Mi distracción favorita
Tras la lluvia caída y a primera hora de la mañana cuando la luz incide lateralmente sobre las gotas atrapadas en la vegetación del jardín, cámara de fotos en mano me sumerjo en un mundo mágico y efímero. Una vez más las joyas de mi jardín.
Diamantes sobre las hojas del rosal.
Una medusa de luz y agua.
Equilibrio en el mismo borde de los pétalos de una rosa.
Topacios engarzados .
Zafiros rosados .
Burbuja de agua y luz ensartada.
Gotas atrapadas entre los blancos filamentos del Cabeza de Viejo.
¡Esta me encanta! ¿Qué podría ser? Un extraño ser que se debate entre la creación y la destrucción .
Hay muchas más pero por hoy esta es la última, el Heliodoro o berilo dorado, gotas de agua transformadas en hermosas joyas. La piedra de Berilio varia entre el amarillo dorado y el verde amarillento claro. Su nombre deriva de dos palabras griegas que significan "regalo del sol". Tras la lluvia, las gotas de agua depositadas sobre la vegetación, son un verdadero regalo.