miércoles, 29 de abril de 2020

PRUNUS NIGRA.

Ciruelo borde. Un arbolito extremadamente resiste. Nunca ha estado enfermo, no hay bicho que le hinque el diente. De mediana complexión, como ciruelo que es florece en primavera y durante todo el año luce un hermosos follaje rojizo. De hoja caduca, así que durante los meses de frío permite la entrada del sol a través de su ramaje.
Fácil de tener y fotogénico a más no poder.
Como lo que tengo ahora es mucho tiempo me he dedicado a tratar las fotografías que le hice a principios de esta primavera con programa de edición.


 Esta es una de las que más me gusta. El blanco y negro le va muy bien. Se consiguen buenos contrastes y en esta foto le he dado un cierto desvanecimiento, diluyendo las formas.



 En cambio en esta he acentuado los grises, matizando y buscando texturas.


Todo lo contrario ahora. busco que el cielo sea su fondo y como no hay nubes al quitarle color da de resultado una imagen en Clave alta  menor ... creo.



Sigo probando en blanco y negro. Solo hay que variar de posición y la luz y el fondo hace que todo cambie, siendo el mismo modelo.


Y para acabar un par de fotos en su color original. Hojas rojizas, florecillas blancas con fondos rosados y largos filamentos para atraer a los insectos.

Los árboles en flor son excelentes motivos para  fotografiar, pero aprovechad que la luz sea lateral y así captareis  las nerviaciones de hojas y pétalos  y si lo que se desea es quedarse con la esencia de la imagen, para eso está el blanco y negro. 



martes, 28 de abril de 2020

CROCUS VERMUS. JARDINES MINIS PARA PEQUES

Piensa en la próxima primavera. Rodéate de naturaleza, que la tengas cerca, que la vista se convierta en tacto y olfato. 
Por pequeño que sea tu espacio seguro que te cabe una maceta y si tienes sitio para una maceta la primavera que viene la naturaleza te regala con su presencia.
En un tiempo en que mi día a día era estar rodeada de peques cada otoño llevaba a cabo la siguiente actividad, que recomiendo la tengáis presente para futuras primaveras.
 A principios de otoño, atentos para comprar una bolsita con bulbos variados de color de Crocus vermus. En una maceta, de 30 cm. caben todos los bulbos del paquete y si hay más niños que macetas con una maceta pequeñita para cada uno, se distribuyen y así maceta personalizada. La cuidan, la vigilan ... se impacientan pero en cuanto despunte la primavera habrá valido la pena la espera.
El crocus es primo hermano del azafrán, pero en este caso es únicamente ornamental. Una vez introducido el bulbo en la tierra no importa que haga frío, lo soporta, si solo recibe agua de lluvia, lo soporta. Sabe sobrevivir con su carga de nutrientes en las peores condiciones y cuando llegue la próxima primavera vuestra maceta será un minúsculo jardín de flores; blancas, amarillas, azules y hasta púrpuras y las abejas lo agradecerán. Y si tenéis niños cerca, no dejéis de mostrarles este camino.

domingo, 26 de abril de 2020

EL PEQUEÑO LIMONERO CUATRO ESTACIONES

Es el limonero ideal para tenerlo en el jardín. Floraciones y frutos todo el año.
Lleva 5 años plantado y de momento se le ve sano. 

Estoy teniendo especial cuidado con este ejemplar.  El otoño pasado dio su primera floración y esta es la segunda. 


A parte de proporcionarle abono natural (estiércol tratado)  para enriquecer la tierra donde está plantado, no es nada buena, muy arcillosa y hay que cavar a menudo para que al menos el alcorque esté receptivo al agua añado una vez al mes nutrientes especiales para cítricos... 


El riego  una vez al mes aportando fósforo, nitrato y potasio y parece que se desarrolla bien.

Vigilo las hojas ya que tengo la mala experiencia de la invasión de orugas minadoras, no son visibles y se sabe de ellas porque las hojas presentan  microscópicos túneles interiores que debilitan las hojas y si no se controla a tiempo pueden matar al joven ejemplar.  
En estos momentos está precioso combinando flores, pequeños frutos y frutos maduros.

miércoles, 22 de abril de 2020

LA OBSERVACIÓN SILENCIOSA DE MI NIÑA INTERIOR.

Es como esas malas duermevelas en las que empalmas imágenes inconexas, disparatadas y que te dejan dolor de cabeza al  despertar. Les llamamos pesadillas, y sabemos que solo son el fruto de nuestra mente dormida y descontrolada y a partir de ahí el día coje su rutina y tu te montas en ella.
Pero no. 
Mi niña interior me tiende la mano una vez más y el pequeño jardín se transforma en un gran mundo para explorar y mi mente se libera. 


Las minúsculas flores de la siempreviva abren sus transparentes ojos hechos de lluvia y captan fragmentos del jardín pero no llegan a ver al insecto que subido en ella prepara un salto hacia una dirección que solo él sabe.


El fruto del Prunus nigra, ciruelo borde, parece caramelizado pero ni es azúcar ni estará dulce. Efímeras gotas de agua lo revisten hasta cubrirlo por completo para luego lanzarse al vacío y dejarlo ahí suspendido. Nadie más que mi niña interior lo puede ver.


Los rosales están a punto, llenos de capullos reventones, y algunos,  no todos tienen ojos, esos ojos transparentes, brillantes que se cruzan con los ojos de esa niña interior que pasea por el pequeño jardín como si de un gran mundo fuera.

Esa niña interior no me ha dejado nunca. Empezó a hacerme compañía entre las macetas de la casa vieja, callada no se podía hablar, era la hora de la siesta y los mayores dormían y si hacía ruido se podían despertar. El juego silencioso podía durar horas.

Este juego de ahora está durando días y entonces la niña sabía cuando podía acabar, ahora no.

lunes, 13 de abril de 2020

LLUEVE. CUATRO PRECIOSIDADES DE ESTA MAÑANA

Un clásico en este espacio. Gotas de lluvia tras la tormenta.
Hoy el día se ha levantado lluvioso y con ganas de seguir durante toda la jornada. Llevo muchos años practicando esta técnica y ya me conozco en qué lugares voy a encontrar las mejores gotas de lluvia atrapadas, qué luz es la más apropiada y algo muy importante el fondo para que destaque el juego de luz y de imagen invertida que se da en ese minúsculo espacio y en ese preciso momento.
Y algo más que hay que añadir, todo un ejercicio de meditación. Hay que concentrarse, aguantar la respiración y ejecutar el clic con precisión .
Os invito a disfrutar de ese momento mágico y efímero 

Tallo joven de rosal por eso tiene ese color rojizo y una de las gotas sustentada y delimitada por una de las púas que queda atrapada en su interior.


Tres filamentos  en las terminaciones de una pequeña crasa han pinzado una gota de agua que se al mismo tiempo que calculo en que momento se va a desprender, capturo en su interior un juego óptico encerrando en su transparente y pequeño volumen parte del jardín .


Las flores de las calas nunca fallan. Tras la lluvia sus grandes copas blancas atrapan con gran profusión infinidad de gotitas, sólo queda todo lo dicho anteriormente; luz, fondo inclinación y ahora toca moverse alrededor de la flor  hay infinidad de ángulos realmente magníficos.


Y la última de la selección de hoy. Esta crasa que es capaz de vivir del aire fue  la que me dió la idea allá por el año 2008. Era una mañana  que paseaba por el jardín tras la lluvia caída y las gotas suspendidas de sus carnosas hojas me llamaron la atención, aquella vez fue un destello de luz que rebotó en su interior y esta vez... si os fijáis, veréis  las ramas de la jacaranda que todavía no tiene hojas y que parece arañar con sus retorcidas ramas el cielo. ¿ La véis?
Una vez más el mágico jardín me proporciona; distracción, paz, belleza y admiración por las cosas maravillosas y sencillas de la vida. 

domingo, 12 de abril de 2020

AMAPOLAS DEL ROJO AL NEGRO. UNA PRIMAVERA DIFERENTE

Yo quería que en mi jardín hubieran amapolas porque si en los campos habían, por qué no en un mágico jardín y compraba semillas de amapolas las sembraba y no salían y así durante varios años... y no salían. Dejé de comprar semillas de amapolas y que no salieran era lo de esperar. 


Hasta que hace tres primaveras una plantichuela por aquí y otra por allá. OH, sorpresa!! las amapolas habían decidido venirse a vivir a este lugar.


¿Me pregunto qué es lo que ha sucedido? Sé la respuesta que me voy a dar, aunque tal vez base científica no tenga. ¿Qué fue antes la amapola o la semilla? ... o era un huevo.


 A estas alturas y dado como como un virus nos ha paralizado a aquellos que pensábamos que eso era de otros lugares ya no me apetece hacerme la pregunta de por qué yo sembraba y no salía y ahora que no siembro sale.

Eso sí, siempre he sabido que las amapolas son espíritus libres en la Naturaleza. No permiten que se las corte y sean llevadas a ningún florero, si se ven en ese trance se defienden despojándose de su belleza y perdiendo todo lo que nos llevó a arrancarla de su espacio vital y de su ciclo. Se nos quedan entre las manos inertes como rechazo a nuestra intromisión en su vida.


 Las amapolas visitan este jardín cada primavera y a pesar de que yo vuelvo a intervenir quitándoles su rojo color porque como humana que soy manipulo su aspecto, a ella le da igual porque esto no es natural y ella sí lo és.


Su color rojo intenso su flexibilidad y su aparente fragilidad al ojo humano las hace hermosas y deseables. Desde nuestro encierro solo podemos ahora imaginarlas tiñendo los campos vacíos de humanos y llenos de esas vidas que tan poco respetamos.


viernes, 3 de abril de 2020

FLORACIÓN EN CACTOS Y CRASAS. PRIMAVERA EN BLANCO Y NEGRO

El ciclo primaveral está en pleno desarrollo . Los cactos y las crasas están en flor y sus curiosas formas destacan más si cabe cuando el color desaparece.
Ahí está con su enorme volumen. Tiene más de 45 años  un metro de altura y unos 70 centímetros  de ancho en su parte más central. No es una perfecta bola, pero casi.
Su coronilla se delinea de flores cada primavera. 

Ahí las tenéis un poco más cerca. Es como una cabeza de espinas  coronada de ásperas inflorescencias.

Una imagen macro  para ver con más detalle las flores del conocido vulgarmente asiento de suegra.
Púas y flores  en perfecto círculo.
  Una pequeña crasa que también florece entre sus carnosas y jugosas hojas. 

Vista más de cerca. Las flores se montan en unos pedúnculos que se alargan para destacar entre sus hojas

  Otra crasa. Esta agrupa sus hojas como su fueran pétalos regordetes y lustrosos. Es la primera vez que la veo florecer, minúsculas florecillas agrupadas componiendo un delicado pomo floral de suaves tonos rosáceos que destacan entre el verde gris de las hojas.

Y entre las crasas una variedad de las tan conocidas Siemprevivas. Esta florece tras sacar largos tallos carnosos que se doblan como tentáculos buscando la luz y el sol y en su extremo saca unas pequeñas florecillas en forma de piña.
Un día más y un día menos en esta primavera que nada se parece a ninguna vivida.

miércoles, 1 de abril de 2020

LA OLVIDADA Y RESISTENTE CRASA PELUDA Y PERFILADA. PRIMAVERA EN BLANCO Y NEGRO

 Seguro que os ha pasado.
Un día compráis una plantichuela  que os atrae por la perfección de sus regordetas hojas y de esos detalles que parecen pintados y perfilados a plumilla  con algún borrón que otro.


Los pasos por el pequeño jardín ahora se convierten en imaginarias salidas a ese exterior que nos tienen vedado.

Mi fiel compañera, la cámara de fotos que me acompaña como siempre. Me muevo con lentitud para que sea más largo el tiempo que no el espacio.
Observo, me acerco y la redescubro.

 Es así como me cautivó.  
 Sigue viva en su pequeño recipiente. Algún mal viento llegó a tronchar sus carnosos tallos pero aún y así rotos sigue ahí.

Ella no se va a perder esta primavera. 

Además el blanco y negro le sienta muy bien.

Las crasas esas supervivientes de nuestras ventanas, nuestros balcones y rincones olvidados no nos abandonan. No las abandonemos nosotros, piden muy poco. Se desarrollan lentamente y cuando se nos pasa el furor de haberlas adquirido las olvidamos y un día como hoy nos reencontramos.
Somos supervivientes.