viernes, 7 de septiembre de 2012

DURMIENDO FUERA DE CASA

 Supongo que los que entienden de abejas, tal vez lo encontraran normal.
Seguro que los que entienden de fotografia verán ruido, desenfoque  y un montón de "artefactos" en mis imagenes .....    ¡Pero a mi me encantan!
Y no solo como imagenes, yo las considero un maravilloso hallazgo.
Son un par de abejas totalmente acurrucadas sobre las peladas ramas de un rosal casi devorado por las verdes orugas que engordan  a su costa.
Mi escudriñadora mirada matinal en busca de esos cilindros glotones y verdosos para maldecirlos una vez más se detuvo en seco
¿Qué es eso ?  Me acerco hasta casi pegar mi nariz al bichito suspendido en la repelada ramita.
Confirmado , es una abeja .... y en la misma planta otro congénere. Parecen que se hayan quedado pegadas.
 Mi desconocimiento me hace maldecir de nuevo a las durmientes orugas que descansan tranquilamente trás una cena opípara  celebrada con nocturnidad y alevosía . Pienso que han sido las causantes de la muerte de las abejas y que además las han empalado .
Sigo observando la extraña posición de las abejas y decido ir a buscar la cámara .
Unas cuantas fotos a mano alzada y con el objetivo macro dan un resultado malísimo, así que decido ir en busca del tripode. Cuando vuelvo con la cámara montada las abejas ya no están.

Recuerdo que leí hace unos días  que la mejor imagen es la que no hacemos entre toma y toma .
Y las que hoy he hecho son una verdadera birria.
 Al día siguiente cumplo con mi rutina matinal ¡ Y ahí está ! Esta vez solo hay una , pero parece que respira . Salgo pitando a buscar la cámara pero esta vez con soporte .... las que haga no van a salir movidas. Y de esa manara consigo las 4 imágenes anteriores. Ya con el tripode bien asentado me acuerdo de que hace unos dias me hice con unos tubos de extensión que permiten  tomar la imagen con más aumentos , pero no los tengo a mano y eso que he leído que una buena fotografia es el resultado de una buena planificación. Pero eso será mañana .
Me quedo observando la posición aletargada de la abeja. Estoy a pocos centímetros. Observo su cuerpo que se agita  a causa de una respiración muy lenta.
Los mosquitos me están acribillando las piernas así que dejo mi puesto de observación. Mañana será otro día.

Un nuevo día.
 Me he rociado  con repelente antimosquitos.
Cámara bien instalada en el trípode , tubo de extensión acoplado al objetivo de 85 mm.
Y allí está, otra vez la abeja ha dormido fuera de casa.
Me acerco y empiezan las fotos. Su respiración es pausada. El movimiento se observa en un leve balanceo del abdomen.

¡¡ Y de pronto estira una pata !!!
 Se está desperezando
 Ligeros temblores que poco a poco
 se hacen más rápidos
 Parece que pierde el equilibrio .... pero no
 Se reactiva y sigue con sus ejercicios

 Mañana  volveré y tal vez la abeja me cuente  porque duerme fuera de casa.

¡Vaya con la emoción no he firmado las fotografias ! Bueno así quedan mejor.