EMPIEZO PODANDO LOS ROSALES

El rosal es un arbusto caduco perteneciente a la familia de las rosáceas, Es una planta muy rústica que ofrece una de las flores más bellas que se pueden encontrar en un jardín. Por su fortaleza, por su belleza por su austeridad es por lo que le brindo mi más profunda admiración.

Admiro como este ser vivo es capaz de pasar de unos troncos cuajados de espinas en la mayoría de los casos a ofrecer el esplendor de sus flores y el aroma que de ellas se desprende. El rosal vive y te deja vivir. Descansa y te deja descansar. Solo necesita unos pocos cuidados cuando empieza a despertarse y eso es lo que está sucediendo ahora en los rosales de mi jardín.
Los rosales se podan en dos épocas, la época vegetativa (de primavera a otoño) y la de reposo (invierno) Ahora hablaré de la época en la que estamos. Será en este momento donde le daremos forma a la planta
Primero que nada antes de comenzar a podar hay que lavar y desinfectar las herramientas que vayamos a usar. Como si de una intervención quirúrgica se tratara. La planta es un ser vivo y al igual que nosotros puede enfermar por infección al utilizar utensilios en malas condiciones.
Los rosales deben podarse en invierno . En climas suaves, puede hacerse en pleno invierno, pero en zonas más frías, con heladas intensas, es mejor a finales del invierno cuando ya el frío es menor (en España, febrero-marzo) .En el lugar en el que vivo y siguiendo los consejos de un viejo y experimentado jardinero de la zona yo realizo la poda de mis rosales alrededor de la segunda semana del mes de febrero .
Se ha de eliminar las ramas secas, muertas, dañadas o enfermas. Para saber si una rama está muerta, la superficie que se ve tras el corte del tallo es de color marrón; si está viva es de color blanco. Observar el color de los cortes en los tallos del rosal de la imagen

Se ven de color blanquecino, la rama está sana. Elimino flores marchitas y frutos. Las flores que ya se han pasado afean al arbusto y le consumen energías para formar el fruto (llamado Rosal escaramujo).
Es importante que el corte sea siempre oblicuo, evitando así la acumulación de líquido. Procura tener bien afiladas las tijeras para que no se produzcan desgarrones

Hay que observar una separación correcta que separa el corte de la yema, ni demasiado lejos ni demasiado cerca.
Debemos conseguir un arbusto con 4, 5 ó 6 ramas principales (su estructura base). Se podan los brotes del año anterior a más o menos la mitad de su longitud.Algunos tallos viejos se podan intensamente a unos pocos centímetros del suelo, para que rebroten y se renueven
Una planta con muchas ramas da flores en abundancia, pero de una apariencia mediocre, ya que malgasta la savia en alimentar ramas innecesarias. Yo prefiero rosas de calidad y además como el jardín es pequeño mantengo muy controladas las alturas de las matas y que se mantenga un porte mediano
A la hora de realizar la poda, hay que intentar abrir el rosal, evitando que las ramas se crucen. Debe pasar el aire y el sol.

Los cortes sobre yemas se harán a 6-10 mm por encima de una yema fuerte y bien orientada (hacia afuera), con una inclinación de 45º (de forma que una gota de agua escurra hacia el lado contrario de la yema). Si se hace más cerca o con inclinación contraria la yema puede morir; si más lejos se formará un muñón que consumirá energías antes de morir y puede ser entrada de enfermedades.

Aunque a veces las yemas son poco visibles, se encuentran siempre en las axilas de las hojas (zona que hay entre la inserción de la hoja en la rama y ésta). A veces la hoja ha caído pero podemos ver la yema junto a la cicatriz dejada.

A estas yemas se las llama proventicias, y se han formado a la misma vez que se ha desarrollado la rama donde están situadas. Además los rosales poseen la característica de emitir abundantes yemas adventicias, esto es, yemas que aparecen en cualquier otro sitio generalmente como respuesta a la poda.

Una vez que ya se cuáles son las ramas sobre las que tengo que intervenir, Hay que fijarse en las hojitas . En el extremo superior de la rama observará que las hojas se presentan en grupos de cinco.

Mientras que según va descendiendo las hojas aparecen de tres en tres.

Pues bien deberá de ser en la unión de la última ramita de cinco hojas con el tallo donde deberá de realizarse la poda. De esta manera estará determinando la dirección que tomará el nuevo brote.
Parece un tanto complicado pero vale la pena tener en cuenta estos conceptos Los resultados que se obtienen son muy buenos; plantas robustas y sanas y rosas espectaculares.

En las fotografías se puede observar ahora que no hay vegetación el sistema de riego que es muy sencillo pero muy practico unos tubos que se dirigen al pie del rosal y allí el agua saldrá por goteo. Regar así es lo ideal, el agua no se malgasta y las hojas de la planta no se mojan hay que evitar emplear la manguera o los aspersores sobre la planta la humedad en las hojas facilita las enfermedades por hongos (ya hablaré en su momento de ellas) Estos hongos llegan a debilitar tanto al rosal que le pueden causar la muerte. Por lo tanto control con el riego, es preferible que pase un poquito de sed a que se ahogue.


NOTA:

La personas que ya conocen este blog saben que no soy jardinera, no es mi profesión, pero si mi distracción. Lo que escribo en este blog es el resultado de mi experiencia a la que he llegado cargada de mucha ilusión bastante observación , más de una charla (sin ánimo de lucro) por parte del experto que a bien a querido responder a mis "tontas" preguntas algunos libros de aquí y de allá y más de un sacrilegio cometido en este campo de la jardinería por eso creo que MI JARDÍN ES MÁGICO, sigue floreciendo todas las primaveras.

Todas las fotografías son propias y exclusivas por eso llevan mi nombre.