CAPÍTULO VII . ROSAS CON NOMBRE. LAS ROJAS.

Rosas rojas con nombre propio. 6 ejemplares magníficos. 

En honor a un oceanógrafo, una actriz, un escritor,  y dos coches, el Crysler y el Testarrosa 

¿Quién no ha tenido alguna vez en sus manos una rosa roja?

Hoy os muestro  las flores rojas de mis rosales. Parecen iguales pero tienen personalidad propia.

Este es Comandante Cousteau. Los que ya tenemos unos años al evocar el nombre de este personaje nos viene a la mente su trabajo en defensa de los mares y océanos acompañados de un físico enjuto y de ceño  fruncido. Los franceses saben honrar a sus gentes y ponen nombre a una creación de rosa vigorosa, perfecta, espléndida y con un aroma a rosa intensa inigualable . Es uno de los mejores ejemplares que tengo en el jardín. Capaz de aguantar las inclemencias sin deterioro alguno. Perfecta para fotografiar con lluvia.

 Y este es Willian Shakespeare. Creación  de David Austin. Preciosa rosa del tipo antigua inglesa con todas las características que así lo definen. Perfume muy intenso a rosal antiguo de un rojo carmesí que pasa al púrpura intenso según va abriendo la flor. En arbusto de mediana altura  que esconde sus floraciones entre las intensas hojas verdes muy resistentes a los  hongos.

Una rosa para comérsela, Ingrid Bergman, sí!  Sus pétalos pueden acompañar postres y ensaladas. Tienen un sabor dulce y suave de una textura consistente  muy agradable.
Este rosal de porte erguido y muy resistente fue creado por el rosalista danés Poulsen.
Da perfectas rosas híbridas de té  excelente también como flor cortada ya que se da en altos tallos, erguidos, solitarios y muy centrados. Una rosa para regalar en solitario.

Vamos con los rosales que llevan nombre  de coche. La verdad es que el mercado de la rosa de para mucho.

 Rosal Testarossa, como el ferrari, sí ! 

Cuando empieza la floración el espéctaculo es mayúsculo. En cada tallo pueden abrir varias rosas al mismo tiempo, fuertes, perfectas,  con algunos pétalos ondulados que les dan una aire de opulenta ligereza. En estos momentos del mes de mayo cuando la mayoría de los rosales ya han dado lo mejor de su naturaleza y andan recuperándose del esfuerzo Testarrosa se hace con toda la atención.

Y para acabar Crysler Imperial. Nombre de coche, sí. Creado por Lammers un rosalista americano que llevó  acuerdo con el fabricante de coches Crysler  para su lanzamiento y promoción.
Es muy interesante cuando se empieza a saber sobre las rosas y las nacionalidades de sus creadores.

Lo digo por este ejemplar de creación americana, californiana para más exactitud.
Buen precio en el mercado. Muy resistente a las plagas. Flores grandes, perfumadas y muy resistentes. Se puede encontrar fácilmente ya que es un clásico en el mercado y dadas sus cualidades muy adecuado para aquellos que  quieran tener un rosal  que al menos cubra varias temporadas  hasta que se vaya aprendiendo en esto de tener rosales a nuestro cargo.

Y hasta aquí.

En el próximo y último capítulo sobre mis rosales con nombre os mostraré tres ejemplares que no olvidareis.