NARANJA. EL COLOR

Amarillo subiendo el tono o Rojo con matices amarillos.

El NARANJA ante los potentes rojos y los luminosos amarillos no deja de tener un papel secundario en los colores.

Los cabellos ¿son rojos? El atardecer ¿es rojo? 

El rojo lo asociamos al peligro y en cambio es el semáforo de color ámbar , naranja , el que nos alerta, los chalecos protectores son de color naranja y además es el naranja el que verdaderamente contrasta con el azul y azul tenemos mucho en nuestro planeta. 

El color Naranja es un color que no deja indiferente , poco es llamativo y mucho puede resultar agresivo.

El  NARANJA es amarillo y rojo, luz y calor. Es un color visible en el mar , en la niebla y en la semioscuridad y en cambio pocos coches naranjas vemos y tal vez habría que pensar más en este color al elegir la pintura de nuestros autos, en cambio sí nos atrevemos a ponerlo en la pared o vestirlo en el verano pero no tanto en el invierno, fijaciones humanas. Según como y cuando se usa nos pueden tildar de extravagantes y en cambio  el Dalai Lama nos tiene acostumbrados a verle con este color. Para el budismo el NARANJA es perfección e iluminación.

Y todo esto viene a cuento porque es uno de los colores que estos dias más destaca en el jardín y la verdad es que el contraste con el verde de las hojas jóvenes es espectacular.

Las imágenes de cabecera pertenecen a una planta de hojas carnosas y muy resistente a la sequía se la conoce como Rayito de Sol , LAMPRANTHUS AUREUS. Su floración es espectacular pero solo lo hace en primavera. Tras las flores un moderada poda para eliminar los restos del esfuerzo floral y hasta la primavera próxima.

CLIVIA, otra de las austeras del jardín , tras un invierno "olvidada" y eso significa no molestarlas con riegos, ni con podas, solo necesitan descanso absoluto en la época invernal. Bajo tierra sus raíces robustas almacenan nutrientes y no se debe  encharcar la tierra,  que será preferiblemente arenosa . No necesita más para que germinen sus COTILEDONES. La Clivia es monocotiledónea lo que significa una sola hoja  germinando y captando energia solar hasta robustecer a la planta. El primer año de vida es vital para la Clivia, si conseguimos que el lugar le sea propicio tendremos planta para unas cuantas temporadas.

En estos dias de primavera la Clivia muestra todo su esplendor. Las flores que pueden alcanzar los 60cm.  se abren en tonos naranjas muy llamativos en cuanto se marchiten se deben cortar , si es que queremos una nueva floración hacía el otoño en las plantas viejas.
Cuando observamos que de la planta madre, en los laterales aparecen nuevas hojitas , es señal de que podemos obtener por separación de mata nuevos ejemplares. Hay que hacerlo con cuidado y no dañar las raíces. Tener a mano un cuchillo afilado y bien desinfectado por si hay que realizar algún pequeño corte para la completa separación de la plantichuela.

La Clivia necesita tener sus raíces más bien apretadas así que mejor en maceta pequeña y si está en tierra no tendrá ningún inconveniente en compartir terreno con otras que como ella puedan disfrutar de sombra, escasa agua y temperaturas templadas no inferiores a los 5º .

Y aquí está ROBIN, uno de los Petirrojos con más descaro del jardín.

En cuanto el agua de riego moja la tierra es el primero en llegar,  creo que vive en el jardín. Cuando trasteo entre las plantas y macetas me parece sentir como que un ratoncillo corretea por los alrededores, pero no es un roedor el El Petirrojo que así se desplaza a rápidas y cortas carreras por entre las plantas.

Pit-Roig es su nombre en catalán. pecho rojo , aunque yo lo veo más bien de un naranja muy vivo.
No ha sido difícil fotografiarlo solo había que tener al lado de la azada cuando remuevo la tierra   y el agua está dada, la cámara a punto y esta vez tenía todos las parámetros de la cámara controlados;
El diafragma a F/ 16 , es una buena abertura para no perder detalle, velocidad rápida 1/400 y el ISO a 400  proporción inversa a la velocidad escogida, teniendo en cuenta que no hay mucha luz. Algo de trabajo con el programa de edición de imagen ya que sus plumas pardas había que darles contraste y nitidez con los fondos que no eran los más idóneos para que su regordete cuerpo destacara.

Es muy confiado y sabe que el jardinero es su hacedor por eso en cuanto se percata que van haber tareas en el jardín , permanece vigilante y muy cercano.
Con su destacado color naranja en las plumas del pecho es como un diminuto semáforo  que alerta por todo el jardín que la primavera ha llegado.